¡LO MEJOR DE INCOMPETENCIAS BÁSICAS!
Visto que el verano es el mejor momento para que los políticos salgan por piernas -léase Pepe Griñán-, los sinvergüenzas entren en la cárcel -léase Bárcenas y ERE´s- y la Consejería de Educación aproveche para sacar normativa que nadie se leerá hasta septiembre, nosotros vamos a refrescarles el verano con las entradas con más guasa y/o las más leídas por nuestros seguidores, a los que les deseamos unas felices vacaciones.
Empezamos con la dedicada en agosto del año pasado a nuestro ínclito e iletrado Delegado Territorial de Educación, Cultura y Deporte de la provincia de Sevilla. Justo hoy, un día en que su "jefe", el Sr. Rodríguez Villalobos, se vanagloria (?) de no haber sacado ni un 6,5 en la Selectividad y, sin embargo, ser Presidente de la Diputación de Sevilla. ¡Y así nos va! Como haciéndonos creer que dicho puesto dependiera del mérito personal y no del lamedal en que se ha convertido su partido para medrar. De este modo, el Principio de Incompetencia de Peter se reproduce en este caso con otro gran corolario, ya que un mediocre incompetente siempre nombrará a otro más mediocre y más incompetente que él para cualquier puesto de confianza, lo que se denomina en perspectiva empresarial un proceso de selección negativa: el nombramiento de los peores. Poniéndose de este modo en precario todo el sistema organizativo al ser dominado éste por la ignorancia, la prepotencia y la frivolidad, convirtiéndose en el caldo de cultivo perfecto para la corrupción y el robo. ¿Les suena a algo? Ahí les dejamos con un resumen de dicha entrada.
¿SABE ALGO DE EDUCACIÓN EL NUEVO DELEGADO TERRITORIAL?
De D. Francisco Díaz Morillo, el nuevo Delgado de Educación, Cultura y Deporte en Sevilla, sólo conocemos que fue varios años alcalde del pintoresco pueblecito de Villamanrique de la Condesa, de 4.000 habitantes tan sólo, famoso por ser cuna -según ellos y que por dios no se enteren los almonteños- de la Romería del Rocío -lo que, la verdad, no dice mucho en su nuevo perfil de delegado provincial. En su biografía profesional publicada en la página web de la Junta de Andalucía se señala -por omisión que queda más discreto- que no posee ningún título de educación superior -diplomatura o licenciatura-, con el eufemismo de "cursó estudios de Derecho" que es como decir se matriculó algún año pero no terminó nada y, además, el cargo que lo ha aupado a esta nueva macrodelegación territorial de Educación, Cultura y Deporte es, prepárense, "presidente de la mancomunidad para la gestión de resíduos sólidos urbanos -léase "basuras"- del Guadalquivir"..., ¡cágate lorito! Ya sabíamos que la Educación y la Cultura nunca han supuesto gran interés para esta izquierda cortijera que nos gobierna, visto la nómina impresentable de delegados y delegadas que las han gestionado todos estos años, pero ahora se certifica definitivamente que su concepción de la política autonómica en materia de educación y cultura se encuentra muy próxima a la mera gestión de la "basura". ¡Qué pena! No obstante, para tener una idea más clara del personaje más vale una imagen que mil currículos reelaborados a lo Bibiana Aído. Ahí va. Se avecinan gloriosos tiempos para la Educación Pública desde la izquierda en Sevilla. Sin duda. Para la Cultura y el Deporte también, porque D. Francisco se proclama rociero y sevillista sin tapujos ni medias tintas. Ni diez mil palabras más. Pero eso sí, aunque es una persona cariñosa anda algo justito en cuestiones de competencia en comunicación lingüstica. Pero, bueno, como ZP y ya ven dónde llegó -y no lo decimos por ese precioso acento manriqueño que luce en absoluto. ¿Qué opinión le merecerá a IU este nombramiento? Nosotros se lo vamos a decir: seguro que le parece bien, porque más vale no verse las propias vergüenzas en lo ajeno si se quiere seguir chupando de la teta, con perdón.
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