martes, 29 de marzo de 2011

El liderazgo pedagógico de los equipos directivos

INCOMPETENCIA EN EL CONOCIMIENTO Y LA INTERACCIÓN 
CON EL MUNDO FÍSICO Y NATURAL

Se pone de manifiesto esta incompetencia cuando la Consejería revela una vez más su incapacidad para interactuar con el mundo físico, tanto en sus aspectos naturales como en los generados por la acción humana, de modo que facilite la comprensión de sucesos, la predicción de consecuencias y la actividad dirigida a la mejora y preservación de las condiciones de vida propia, de los demás hombres y mujeres y del resto de los seres vivos.

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Lunes, 28 de marzo de 2011

El Consejero de Educación en Andalucía, Álvarez de la Chica, aboga por reforzar el liderazgo pedagógico de los equipos directivos en los centros docentes.

"El Consejero de Educación, Francisco Álvarez de la Chica, ha defendido la necesidad de reforzar el liderazgo pedagógico de los equipos directivos en los centros docentes, y para ello ha apostado por canalizar toda su energía hacia estrategias docentes, reduciendo los trámites burocráticos y potenciando proyectos de formación. El consejero ha realizado esta reflexión durante la inauguración del congreso ‘Liderazgo y éxito escolar’ que se desarrolla en Granada hasta el próximo 30 de marzo".

El consejero lleva varios meses organizando eventos de este tipo sin importarle los gastos que esto ocasiona y que no sirven para mejorar la educación. Pero, ¿por qué anuncia tanto lo que va hacer y no hace nada para mejorar el sistema educativo andaluz? Ya en los decretos 327/10 (ROC Educación Secundaria) y 328/10 (ROC Educación Infantil y Primaria) se recuerda que en la Ley 17/2007, de Educación de Andalucía (LEA), “se refuerza la función directiva, potenciando su liderazgo pedagógico y organizativo” ¿Acaso se puede hacer a una persona líder mediante BOJA? ¿y “líder pedagógico” qué es? ¿Cuál es el concepto de líder que tiene el consejero de educación de la Junta de Andalucía? ¡Qué vergüenza para la pedagogía! ¡Qué manera de desprestigiarla! Tal vez nuestro consejero no sabe que en los citados decretos se impone un “modelo autoritario de dirección que supone un retroceso claro en la vida democrática de los Centros educativos”; decretos que, por cierto, han sido publicados en contra de la opinión de la mayor parte del profesorado y de los sindicatos con mayor representación (incluido el sindicato al que él mismo pertenece).

Frente a este concepto trasnochado de "liderazgo pedagógico", la empresa global del siglo XXI será una organización sin líderes, esto es, donde el liderazgo estará tan repartido que se asemejará  más a  la organización de una colmena o un hormiguero. Se aboga, así, por una perspectiva ecológica del liderazgo, liderazgo "difuso" lo llaman otros autores. Desde aquí rechazamos, pues, el "seudo y ñoño liderazgo", que ahora ha redescubierto la Consejería de Educación, que viene a "salvar" al centro educativo del naufragio en el que estamos sin saber hacia dónde. Parece mentira, pero de nuevo volvemos a la épica educativa, a la búsqueda del "mito del jefe/a héroe" o peor, al "comisario político" que controla a los "rebeldes". Porque cuando se determina un liderazgo pedagógico mediante BOJA, lo que se está haciendo es anhelar una “jefatura héroe” creyendo que se van a producir cambios significativos en los centros por el mero hecho de nombrarla. Por lo visto desconoce la Consejería que los docentes van a seguir haciendo las cosas según su manera habitual de interpretarlas, y que por ello no se van a producir nuevas ideas y no va a desaparecer el fracaso escolar. El “mito del líder héroe” crea un circulo vicioso: de cambio drástico impuesto desde la “cumbre” y disminución consecuente de la capacidad de liderazgo en la organización, lo cual nos lleva con el tiempo a nuevas crisis y búsqueda de más líderes-héroes que no existen.

El culto del líder es la manera más segura de conservar instituciones adversas al cambio. El precio que vamos a pagar a la larga es incalculable: centros educativos dispares con importantes lagunas, que van de fracaso en fracaso, tensiones y disensión continua entre el profesorado y una sutil y penetrante consigna de que “el profesorado común”, por sí solo, es incapaz de cambiar las cosas y mejorar, que anidará definitivamente en los centros educativos, como parece ser la desgraciada visión que la Consejería tiene ya, sin darse cuenta que, precisamente, el “liderazgo pedagógico de los equipos directivos” es la manera más segura de no realizar los cambios profundos que los centros educativos necesitan y de fracasar nuevamente en el intento. Estos líderes pedagógicos terminan por padecer la “enfermedad del gran jefe”, que no se entera de nada de lo que pasa -como le pasó a González con los GAL, a Aznar con Irak o a Zapatero con la crisis-, porque sus subordinados le hacen llegar sólo la información más favorable. ¿A cuántos consejeros y consejeras, delegados y delegadas de educación les ha ocurrido esto? ¿A cuántos directores y directoras les están haciendo la pelota en los centros educativos para que nada se mueva?

El ejemplo más claro de lo que decimos lo tenemos en la propia Consejería, donde sus "líderes pedagógicos"(consejeros/as), han arruinado la política educativa durante décadas. Solemos pensar que las decisiones más difíciles deben estar en manos de líderes, personas con capacidad de decisión y de dirección, inteligentes, que distribuyen tareas, supervisión, acciones, coordinan grupos... Sin embargo, si echamos un vistazo a Torretriana, estos nombramientos de líderes han respondido más a criterios ocultos de cuotas de poder  y componendas varias que a su excelencia reconocida en la gestión educativa.  Lo mismo pasará en los Centros educativos, bueno, ya está pasando. Supongamos ahora que Torretriana es un hormiguero donde la inteligencia es colectiva, no individual. Ante un problema son incapaces de hallar una solución como individuos -una sola hormiga no sabe encontrar el camino más corto hacia el alimento, ni defender su espacio ante invasores-, pero en grupo sí lo son. Como bien dice Eduard Punset, en una colonia de hormigas “no manda ni dios”, no hay nadie al cargo, nada de jefes (la reina sólo pone huevos, no manda). No se necesitan líderes pedagógicos, sino escuelas inteligentes. Las hormigas no necesitan supervisión, se autogestionan. El consejero debería aprender de las hormigas, hacer de Torretriana un "hormiguero" -que ya lo parece- y limitarse "a poner huevos": dar recursos, visitar centros, cortar cintas en inauguraciones, hacerse fotos... A la postre, son y serán los Centros los que harán realidad la educación. Que se limite a apoyarlos con recursos suficientes -humanos y materiales- y les dé la autonomía pedagógica y de gestión que están reconocidas tanto en la LOE como en la LEA. A ver cuándo lo hace realidad y se deja de inútiles "liderazgos trasnochados".

                              EL LIDERAZGO DE LA INSPECCIÓN


EL LIDERAZGO DE UNA HORMIGA

4 comentarios:

  1. Los que tenemos ya seis sexenios nos acordamos de los "líderes pedagógicos" que conocimos del extinto Cuerpo de Directores que aún existía en los 80: un verdadero DESPROPÓSITO que tuvieron que suprimir. Constantado el fracaso, pero por lo visto olvidado por el sr. de la Chica, vuelve a anhelar el "liderazgo pedagógico" de los nuevos directores reunidos en Granada y... VOLVEREMOS A FRACASAR!!! Cuándo se enterará esta nueva Reina del Hormiguero de Torretriana que reinventando la pólvora no vamos a ningún sitio, ni se arregla ningún problema. El infame ROC supone la adopción de una estructura piramidal-jerarquizada en una organización educativa que exige el compromiso de todos los los niveles de la organización por igual. Un director-líder puede controlar las entradas y salidas del horario del profesorado, el dinero (!) y la disciplina, pero nada puede hacer con respecto a la calidad educativa si no es con el concurso y la colaboración del resto. Y esta colaboración jamás se conseguirá con estructuras autoritarias. Lo que se conseguirá es que los centros educativos se conviertan en un "lamedal", como ya lo es la política educativa en Torretriana.

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  2. Si de verdad supieran lo que están creando recularían automáticamente. Es una vergüenza lo que los directores están haciendo ahora mismo en los centros. Son unos pequeños dictadores que no pisan las aulas por si les da un brote alergico, no solo no dan clase sino que encima van presumiendo de "referentes pedagógicos". Vamonos de este país

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  3. María del Amo, tengo 32 años, desde hace 10 años trabajo en educación y discrepo totalmente de tu afirmación. Tienes base científica para decir eso. Pásate por mi claustro y pregunta. Tu argumento sí que es dictatorial, tu afirmación parece tener la verdad absoluta, y los absolutismos son dictaduras, no lo olvides. Trabaja y lucha por la felicidad de tus alumnos y alumnas, entonces serás una buena maestra. Yo lo intento todos los días. Un saludo. Raúl Parrillo.

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  4. Habrá de todo como en botica, conozco buenos directores pero también a mangantes y sinvergüenzas que se aprovechan de su "liderazgo" para su propio beneficio. Al no haber supervisión ninguna de su labor -lo que diga la inspección es simplemente mentira- a la larga se prima al que desea la dirección para medrar o peor. Al tener menos poder el Claustro para removerlos, los mediocres se asentarán en esos puestos. Sólo hay que ver lo que ha pasado con la politica en este país para ver que la estructura jerárquica de los partidos ha acabado con la excelencia y a aupado a los corruptos e ignorantes. Eso pasa y pasará aún más con el ROC que nos ha impuesto la Consejería.

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