INCOMPETENCIA EN COMUNICACIÓN LINGÜISTICA EN LENGUA EXTRANJERA
No hace falta ninguna prueba de diagnóstico -menos mal- para evidenciar que nuestro sistema educativo es incapaz -desde hace décadas- de enseñar una primera lengua extranjera (inglés o francés, por ejemplo). Después de pasar seis cursos en Primaria, otros cuatro en la ESO y dos en Bachillerato, la casi totalidad del alumnado con 18 o 20 años es incapaz de sostener una conversación básica en otro idioma que no sea el suyo. Eso, dando por supuesto que sea capaz de manejar su propia lengua con soltura -para hablar bien-, lo que es mucho suponer. Generaciones de españoles, después de pasar quince o veinte años "dando" inglés en los centros educativos acaban por tener que apuntarse en la academia de turno o comprar el coleccionable de turno o contratar al profesorado nativo de turno, para lograrlo. Es una de los más claros efectos de la INCOMPETENCIA EN COMUNICACIÓN LINGÜÍSTICA que padecemos. Desde hace tiempo, las familias, preocupadas y conscientes de este problema, apuntan a sus hijos e hijas desde pequeños en la academia del barrio ante la palmaria evidencia del fracaso absoluto al que están abocados en la escuela. He ahí la sencilla explicación de por qué es tan rentable poner una academia de inglés.
La Consejería de Educación, en 2005, también "preocupada y consciente" del mismo problema, lanzó a bombo y platillo, como suele hacerlo, el pomposo PROYECTO BILINGÜE que iba a acabar en Andalucía con décadas de retraso en el aprendizaje de las lenguas extranjeras. Tras los primeros pasos a trompicones, cinco años después los proyectos bilingües de muchos centros no pueden extenderse por falta de profesorado bilingüe y, aunque no lo dicen, por falta de dinero. Si ya era de dudosa moralidad que se limitara dicho Proyecto a una sóla línea (un grupo por nivel) y sólo en algunos centros (los denominados bilingües), poniendo así en peligro el principio de igualdad de oportunidades educativas que se sustituye aquí por el principio del mero azar (de si le toca a tu centro ser bilingüe, o de si le toca a tu niño/a entrar en el grupo bilingüe), ahora la Consejería se da cuenta que no tiene recursos personales para mantenerlos, además de reducir las horas dedicadas a la coordinación de dicho Proyecto en cada Centro. Estas son algunas de las diversas razones por las que muchos Centros se han visto obligados a reducir la extensión del Proyecto o incluso paralizarlo. Si ya es exagerado denominar "plurilingüe" a un Proyecto que se limita a impartir una hora semanal en un idioma extranjero en dos o tres materias curriculares por nivel, (en ocasiones impartida por profesorado bienintencionado que sólo "chapurrea" el idioma porque lo está aprendiendo a la vez que el alumnado al que supuestamente tiene que enseñar), ahora encima muchos centros andaluces se ven obligados a renunciar al proyecto por imposibilidad de seguir manteniéndolo con algo de dignidad. Así que, IDEA: la Consejería de Educación debería sustituir el Proyecto Bilingüe por una buena red de ACADEMIAS DE BARRIO que salen mucho más baratas. Y si además, en vez de sortear grupos bilingües, sortea entre sus alumnos viajes al extranjero, miel sobre hojuelas. ¡ANÍMENSE EMPRENDEDORES!
Si creen que se exagera con la cuestión, ahí tienen algunos vídeos que demuestran cómo varios de nuestros próceres actuales, prototipos claros del éxito educativo, manejan el inglés. ASÓMBRENSE Y PIENSEN QUE APRENDER INGLÉS REALMENTE NO SIRVE PARA NADA, NI PARA SER PRESIDENTE, NI PARA SER BANQUERO. PERO SI QUIERE SER DEPORTISTA DE ALTO NIVEL NO LO DUDE. A la vista está.
¡Da vergüenza ajena!
¿Habrá sido Rafa Nadal alumno de un Centro bilingüe andaluz?
¿Por qué, precisamente, andaluz? A veces, los estereotipos nos superan y nos impiden interpretar la vida de un modo más racional. ¿Cómo llamarías a esta in-competencia?
ResponderEliminarEl problema del aprendizaje de un idioma extranjero es "castizo-español" y viejo, no sólo andaluz. Pero las distintas CCAA vienen dando respuestas distintas en sus territorios competenciales. En la entrada del blog se analiza el despropósito de la política educativa andaluza en relación a los centros bilingües, de ahí el "apellido" andaluz, no porque sea un estereotipo, sino porque es una evidente realidad. Más al contrario, lo que se suele llevar hoy en día es el estereotipo "nacionalista" -"todo va estupendamente bien" es el mensaje de cada Consejería de Educación en su territorio- pero de nuevo la realidad, si se sale fuera de los estrechos márgenes del "nacionalismo", incluso el andaluz, no deja de ser tozuda.
ResponderEliminarOs falta compresión lectora, amigos,lo de "andaluz" no es por ningún topicazo rancio, sino porque está hablando de la consejería andaluza de educación...
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